"INTERNET"

En internet hay muchos programas que no son muy seguros pueden entrar en tu ordenador y se lo pueden cargar. No hay que hacerse amigos de gente que no conoces porque pueden entrar en tu cuenta, en la cuenta de padres, etc...
Lo puedes bloquear o eliminar, no lo tienes que agregar si no quieres.
Los pedófilos o pederastas pueden meterse en tu cuenta con los datos que tú pones en las redes sociales, es decir, twitter, tuenti, facebook, etc...
Hay gente como hackers, pedófilos, que utilizan el troyano para grabar en tu facecam las cosas que estás haciendo.
Nos han enseñado que no hay que meternos en páginas que no sean seguras. Y también nos dieron unos libros que nos decían que qué teníamos que hacer y que no teníamos hacer. Los hackers nos pueden hackear porque mucha gente pone una contraseña corta tipo: Pepe, Moha7, y hay que poner contraseñas con 2signos, 2 letras mayúsculas, 2 letras minúsculas, y 2 números. Y después no me enteré de nada porque  nos llamó Fernando para vacunarnos a: Moha, Paloma, Javi, Criistian y yo.

Dalí mujer en la ventana

Redacción de la ballena y los pecadores

En las aguas de algún océano vivía una ballena azul que nadaba tranquilamente. Era gigante y le gustaba jugar con los peces más pequeños de esas aguas. Pero últimamente estaba algo asustada porque había muchos barcos balleneros, que iban en busca de ballenas como ella. Así que casi no salía ya a jugar y pasaba las horas pensando ideas para poder ahuyentar a los hombres que venían de aquellos barcos.

--¿Cuál es el animal al que más miedo tienen los hombres? Preguntó la ballena a sus amigos.

-A mí. Dijo el tiburón orgulloso.

Y se puso una aleta de mentira. Y el truco funcionó, porque los hombres se asustaron.

Pero unos días más tarde se acercaron otros hombres pescadores de tiburones. Y entonces la ballena cambió de disfraz. Esta vez de delfín. Así lo hizo 4 veces repetidamente. Pero otra vez vinieron los pescadores, esta vez eran de pirañas, y la ballena ya estaba tan cansada de disfrazarse para huir de los pescadores que pensó una idea mejor. Puso un enorme cartel a la entrada del océano del océano que decía "Peligro, hay pescadores de hombres"

Y así los hombres asustados por si  alguien les pescaba ya no se acercaron, !y todos los peces del océano pudieron jugar tranquilamente¡